No hay mejor desaire
Que el silencio querido
Que nutro con mis desilusiones
Ley de pena
Bebo quejas
Y escupo maldades recibidas.
Para que no me envenenen
Frialdad
Descreimiento
No hay mejor desaire para mí
Que el silencio querido
De esa manera puedo seguir adelante
Cabeza erguida.
Corazón herido.
© 2009 Pampina